miércoles, 30 de enero de 2013

LA BATALLA DE LEGNANO (En Video)

Giuseppe Verdi consiguió una gran fama mundial gracias a sus óperas. Pero además tuvo tambien su importancia- mayor o menor según historiadores-  en el movimiento político llamado Risorgimento, que logró hacer de Italia una sola nación.

Él, naturalmente, no era político. Esto lo logró a través de la música. Sus personajes, lanzaban al público mensajes subliminales. Eran parte del argumento. A la censura se les escapaban ciertos detalles.

Las obras juveniles de Verdi, tienen alusiones a la unificacion italiana. Attila, Lombardi, Ernani, Giovanna D’Arco y el propio Nabucco, serían ejemplos. Mas en “La Batalla de Legnano”, ya no hay insinuaciones. Son  rotundas y claras alusiones contra los enemigos del pueblo italiano, marcando a los austriacos como culpables de la situación.

Su estreno en Roma, precedió a la creación de la República Romana, después de que el Papa huyera de la ciudad eterna. Era la primera guerra de independencia. Terminó con muchos muertos y quebrándose la ilusión inicial.

Puede pues afirmarse con rotundiad que “La Battaglia” se utilizó como un activo componente de publicidad para aumentar el sentir patrio popular, No es que el resto de óperas citadas no lo hiciera sino que ésta lo efectúa mucha más fuertemente.,  

No obstante, la obra no se queda solamente ahí, ya que tiene unos fragmentos musicales y dramáticos sumamente interesantes. No puede olvidarse que el músico  estaba ya muy cerca de su primera madurez compositiva.  

viernes, 11 de enero de 2013

MACBETH (En Vídeo)

MacBeth (1847) es una creacción de juventud, a media distancia entre el “Nabucco-(1842)”  y “La Trilogía popular-(1851/1853) ”.  Pertenece, por tanto, a sus “años de galeote”. Un periodo en el que trabajaba a pleno rendimiento. No se podía permitir el tiempo necesario para recapitular sobre lo hecho. Las “galeras” produjeron once óperas. Todas, más o menos, tuvieron éxito. Algunas de forma extraordinaria.

Pero es que además, tuvo una amplia revisión en 1865, con lo que se mezclan en una misma ópera, el espontáneo compositor juvenil, con el ya maduro, de estilo más refinado bajo todos los puntos de vista.

Cuando se presentó en Paris la revisión, una revista francesa sugirió maliciosamente que Verdi “no conocía o no entendía a Shakespeare”. Verdi se enfadó mucho y escribió una carta en la que, entre otras cosas, ponía: “..... Lo he tenido entre las manos desde mi primera juventud y lo leo y releo continuamente”. Se sabe, efectivamente, quer durante toda su vida, demostró la más profunda admiración por Shakespeare.

Para concluir, decir que, a pesar de ser obra de juventud, aguanta muy bien el paso del tiempo. Según el “Grove’s Dictionary of Opera, 1992”, el número total de óperas compuestas sobre el personaje es de dieciseis. De entre ellas la única que ha podido mantenerse asiduamente en los carteles de los teatros, es la verdiana. Todas las demás han sido objeto del más absoluto olvido.     


viernes, 4 de enero de 2013

JERUSALEM (En Video)

Giuseppe Verdi pretendía con "I Lombardi alla prima crociata" ("Los lombardos en la primera cruzada"), alcanzar el éxito delirante del "Nabucco" de 1842,  un año después del grandioso debut de esta significativa ópera, basado en la fuerza épica del tema. Los Coros, tuvieron asimismo una importantísima misión.

Pero con “Lombardi”, no logró del todo ese éxito desbordante, tal vez por el enrevesado argumento del grandullón Solera y sus disparates argumentales. Por entonces Verdi, encontraba en estos libretos lo que andaba buscando: un encendido idealismo patriótico del Risorgimento italiano, que, más adelante y sin abandonarlo del todo, dejó de lado pues Italia consiguió su independencia.

Ni Solera ni el compositor lograron un relato coherente, verosímil y atractivo del poema de Tommaso Grossi.
El libretista resalta la misión cristiana y la nostalgia de los lombardos y esto sirve de base al de Busseto para hacer vibrar a sus personajes a través de un canto de bravura.

Es fácil la identificación de los lombardos con los italianos del siglo XIX y también asociar a los odiados austríacos con los sarracenos que profanaban la Tierra Santa.

"I lombardi" se representó pronto, en Europa. En Paris, donde por aquel entonces residía el músico,  la Academia Real de Música, le dio la oportunidad de estrenar allí una ópera.

Al igual que hizo Rossini, prefirió aprovechar una de sus obras ya consagradas, en lugar de crear una nueva. Se decidió por “Los Lombardos”.

Sometido a profundas revisiones en el libreto y en la música, recibió el título de "Jérusalem" y fue traducida del francés al italiano, con el nombre de "Gerusalemme".

Decir finalmente que es muy poco conocida y contemplar fuera de Francia una “Jerusalem” en el idioma galo es una rareza. La obra tiene atractivo y llama la atención por sus grandes escenas escenográficas y corales.