Simplemente por los quince años de diferencia que se lleva con “Aida”, ha
de ser una ópera distinta. Pero no solo por esa causa, ya que Verdi marca con
ella un nuevo camino en el arte lírico italiano, respetando su propia
idiosincrasia. Es desde luego, su testamento musical y por eso requiere de un
mayor esfuerzo del oyente. Para una mayor facilidad de visión, el vídeo está
dividido en dos partes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario